eclektika
ideas libertarias
Sunday, October 25, 2009
Wednesday, October 21, 2009
gasto publico en México ¿insuficiente? o ¿dónde quedó el dinero?
Existe la creencia que el gasto público en México es insuficiente; con este argumento el gobierno federal intenta de nuevo aumentar la recaudación y satisfacer la demanda de todas las dependencias y gobiernos quienes unánimente exigen su raja del pastel.
Es cierto que el la recuadacion de IVA e ISR es baja en México si la comparamos con países de la OCDE pero si integramos el cobro de derechos, importantísimos en un país con un manejo central de los recursos naturales, vemos que el ingreso público rebasa el 35% del PIB y llega más de 3 billones (millones de millones) de pesos anuales,representando casi la mitad de los ingresos de las familias, equivalente a casi 30 mil pesos anuales por persona.
Un razonamiento simple acera de la justificación del gasto público es que éste es para redistribuir el ingreso;
Sino fuera así, simplemente el complicado proceso de imponer cobros (impuestos), con sus inevitables efectos negativos en la actividad económica, para regresar productos públicos de mala calidad que el mercado podría proveer sin problema, no tendría sentido en una sociedad democrática .
México además es uno de los países más desiguales del mundo, por lo que esta función es verdaderamente importante.
De la última Encuesta Ingreso Gasto de los Hogares Mexicanos, de INEGI vemos que aunque la inequidad del ingreso medida con el coeficiente de Gini, ha tenido una tendencia hacia abajo en los últimos años, sigue siendo altísma.
Si la comparamos después de las transferencias del gobierno, vemos que casi no mejora el panorama, El coeficiente de Gini para 2008 baja solo a .482; casi igual.
El sistema fiscal actual tiene efectos nulos.
¿Qué pasaría entonces, si el gasto público se transfiriera directo a los deciles más bajos (de menor ingreso) siguiendo un criterio rawlsarsiano ?
Lograríamos que el ingreso menor por persona quedara en $56,492 anuales, 15.3 veces superior al ingreso corriente promedio mas bajo actual y casi 10 veces considerando las tranferencias actuales !!
De esta forma el 90% de la población tendría el mismo ingreso minimo y sólo el decil X (más rico) lo tendría superior; todo esto con el plan de gasto actual.
Entonces ¿ como es posible que sigamos teniendo áreas completas de personas en la miseria y no exista en México un sistema universal de salud básico después de décadas de gasto público multimillonario ?
Posiblemente un criterio de redistributivo radical es algo poco realista, pero estos indicadores demuestran el desastre completo de nuestro sistema fiscal.
Demuestran también que en el camino perdemos enormes recursos y lo mucho que falta por hacer para lograr un sistema fiscal justo.
Llamados urgentes a una reforma a fondo que nuestros legisladores en medio de sus grillas de siempre no quisieron oir.
NO MAS IMPUESTOS, 100,000 FIRMAS DE RECHAZO
Saturday, October 17, 2009
La burbuja de la mafia de Wall Street en la Rolling Stone
afores caja chica del gobierno
Tuesday, October 13, 2009
Ricardo Pascoe, La Izquierda y el SME
El decreto emitido por el presidente Calderón mediante el cual inicia la liquidación de Luz y Fuerza del Centro, con el compromiso de respetar los derechos de los trabajadores en el proceso de su terminación laboral, abre importantes interrogantes para la izquierda. ¿Qué postura debe adoptar la izquierda frente a esta situación? ¿Debe condenar y rechazar la posición gubernamental ante la liquidación? ¿O puede ofrecer alguna alternativa a los trabajadores y a la empresa?
Al enterarse del acto gubernamental, los dirigentes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) le exigieron al gobierno federal que les devolviera “su” (sic) empresa a los trabajadores. Obviamente sorprendidos por el decreto liquidador, llamaron a manifestaciones de rechazo a la medida oficial. López Obrador ha condenado el hecho y los dirigentes del PRD en el DF llamaron a la población a sumarse a las acciones de protesta. El PRD en el Congreso de la Unión prepara un punto de acuerdo para exigirle al gobierno federal la anulación inmediata del decreto y el reconocimiento a la dirigencia sindical de Esparza.
El momento es importante, pues la izquierda se encuentra ante una disyuntiva, producto de su propia hechura. Puede, como lo sugiere Gerardo Fernández Noroña, utilizar (él dice: “...ni modo...”) este momento para iniciar un gran movimiento que busque derrocar a Calderón. Desde hace tiempo el movimiento de López Obrador se ha movido en esta lógica. Su principal ideólogo, Porfirio Muñoz Ledo, ha declarado la necesidad de derrocar al Presidente “en 2010”, primero con claridad meridiana y, después, cantinfleando y con cierta ambigüedad. López Obrador piensa que puede llegar al poder en un proceso político sui generis, cuyo valor central estaría en la posibilidad de acelerar un proceso de conflicto social magnificado para llevar al país a la ingobernabilidad y, de ahí, al derrocamiento del gobierno. El marco teórico de este proceso empieza con la frase: “Ellos empezaron primero...” (es decir, Calderón habría agredido primero a López Obrador, lo cual justificaría cualquier acción).
Otra opción abierta para otra parte de la izquierda, y que sería congruente con su tradición, es la búsqueda de cambios de fondo ante la decadencia de una empresa fallida y la existencia de un sindicalismo antidemocrático que siempre ha rechazado. Y la izquierda debiera buscar la transformación de todo el sindicalismo del país, sin excepción. La izquierda, teóricamente, ha estado a favor del desarrollo de las fuerzas productivas, y no de su freno. Defender a una empresa en franca decadencia es contrario a la necesidad económica de contar con energía barata, eficiente y accesible. La modernización del aparato productivo, y su competitividad, debieran ser ejes centrales en la preocupación de la izquierda, y no la simple defensa reactiva de factores económicos en plena decadencia. Defender la existencia de LyFC en sus condiciones actuales es, en este momento, reaccionario y contrario a la necesidad del país para salir de la crisis económica. Ante el desafío que le pone el gobierno, la izquierda debiera mirar hacia el futuro y no hacia el pasado.
Tuesday, October 06, 2009
Denise Dresser, Bajar el switch
5 Oct. 09
Friday, October 02, 2009
Muñoz Ledo y Díaz Ordaz
Celebrar el 68: GDO en PRD
+ Oda de Porfirio a represión
Carlos Ramírez
Como el PRD se asume el heredero de las luchas de la izquierda estudiantil, los perredistas podrán recordar hoy la masacre de Tlatelolco del 2 de octubre de 1968 con la relectura de dos discursos de defensa y justificación de Gustavo Díaz Ordaz que hizo el hoy auto denominado jefe de las izquierdas mexicanas: Porfirio Muñoz Ledo.
El ejercicio no es distractor. Muñoz Ledo es el coordinador del Frente Amplio de López Obrador como organización de la izquierda. Por eso los dos discursos plantean una duda: o el PRD no es el heredero de la izquierda ni del 68 y los dirigentes estudiantiles vivos han llegado al nivel del cinismo político de aceptar como dirigente de la coalición de izquierda a uno de los avales morales de Díaz Ordaz y de la represión en Tlatelolco o Muñoz Ledo representa la revalidación del pensamiento político priísta-diazordacista en el PRD.
En uno de los dos discursos, en 1969, Muñoz Ledo dibujó el irracionalismo de los estudiantes en el 68, muchos de los cuales hoy militan en el PRD, y explicó que veía el movimiento estudiantil y popular del 68 como un intento de subversión del orden priísta:
“Al cabo de un prolongado periodo de crecimiento, fuerzas e intereses ajenos a la voluntad del pueblo pretendieron divorciarlo de las instituciones de la República y los más antiguos trasfondos reaccionarios vinieron a condensarse en la idea de que el deber más imperioso para los mexicanos es disminuir la autoridad del Estado e inventar un nuevo régimen constitucional”.
El 20 de noviembre de 1969, en un acto de celebración de la revolución mexicana, Muñoz Ledo utilizó toda su verborrea demagógica para alabar la figura de Díaz Ordaz y señalar que la represión del 68 fue cumplimiento “del mandato popular” que “ha conservado intacta la autoridad del Estado y ha defendido, con el derecho, la soberanía de la nación”. Es decir, que la represión fue patriótica.
A los jóvenes que salieron a la calle a exigir democracia y a protestar contra la represión autoritaria del Estado, Muñoz Ledo, también asesor político de Luis Echeverría, les dijo ante la tumba de Plutarco Elías Calles:
“Hoy, en pocos países como el nuestro los jóvenes encuentran mejores posibilidades de identificación y de servicio dentro de la sociedad civil”.
En septiembre de 1969, Muñoz Ledo habló como priísta en una reunión de análisis del quinto informe de Díaz Ordaz en el que asumió la responsabilidad de la represión del 68. En su discurso, Muñoz Ledo fue burlón con el discurso político del movimiento estudiantil apoyándose en frases de Díaz Ordaz:
“No podemos tampoco alentar la esperanza de que con la “prédica de un voluntarismo aventurero”, impulsando al país por “entusiasmos intermitentes” o por “euforias momentáneas” será factible obtener, al mismo tiempo, la consolidación definitiva de nuestra soberanía, el progreso económico y la justicia social, sin detrimento de la democracia política”.
Muñoz Ledo razonó el papel de la represión para mantener a un grupo en el poder: “nuestro partido ha perdurado y ha acrecentado su poder porque ha triunfado en su propósito de conservar la legitimidad constitucional, la legitimidad histórica y la legitimidad popular de los gobiernos de la Revolución Mexicana”.
No escatimó elogios a Díaz Ordaz: “la herencia más preciada del régimen de gobierno del presidente Díaz Ordaz es la consolidación del marco de nuestro desarrollo por la afirmación de la soberanía interna y externa del Estado”.
Estableció la derrota del movimiento estudiantil: “en todo el mundo existe la convicción de que los últimos movimientos de rebeldía y de protesta han dejado como secuela inmediata el aumento de poder de los enemigos del cambio social. Con la más estricta objetividad podemos afirmar que los conflictos sociales que tuvieron lugar en México y que llegaron a poner en peligro la paz pública no dejaron como saldo el más mínimo incremento de poder o de influencia en favor de quienes se oponen a la transformación acelerada y a la autonomía del país”.
Dio los argumentos de la represión cono tarea política y de Estado:
“Díaz Ordaz dijo, reiteradamente, que ninguna presión obligaría al gobierno a “mediatizar la soberanía de la nación” y, podernos añadir con justicia, que no permitió tampoco que se deteriorara la autoridad que el Estado ejerce sobre los intereses particulares que componen la comunidad mexicana. Con esta intención ha dicho que “ningún grupo, ningún sector, ninguna clase tiene el derecho de imponerse a los demás. La voluntad mayoritaria del pueblo mexicano es la que decide”. En ejercicio de ese mandato, el Poder Ejecutivo tomó sus decisiones y la responsabilidad que asume, es --al mismo tiempo-- la reafirmación de la soberanía externa del Estado y de la supremacía del poder público en el interior del país”
Lo que falta hoy que se cumplen 40 años de la represión en Tlatelolco es que el Muñoz Ledo diazordacista de 1968-1969 sea el encargado del discurso oficial de la autodenominada izquierda contra la represión en Tlatelolco. Sería la culminación de la figura paródica de Muñoz Ledo. Y la aniquilación de la memoria histórica del 68 en el PRD.
loa discursos completos
http://antipolytika.blogspot.com/2009/10/discursos-de-porfirio-munoz-ledo-en.html